Linkin Park - Living Things (2012)

Me encuentro en una situación que no se me pasaría por la cabeza 12 años atrás. Descubrir si el próximo disco de Linkin Park merece la pena o no. Y parece mentira, hace doce años sacaron "el disco", todo el mundo lo conoce, aunque sea únicamente por la canción por excelencia "In The End". Hace doce años y gracias a éste grupo me empecé a meter en el mundo de la música y desde entonces, no he parado de escuchar música a todas horas y en todas partes. Tres años después, "Meteora", disco que les posicionó en la cima con canciones como "From the Inside", "Faint" o "Numb". Hasta el año 2007, con la salida de su disco "Minutes to Midnight", para mi Linkin Park era la cima de la música que yo conocía. Ese grupo que te marca desde tu infancia, el que escuchas a todas horas, del que cuando accedes por primera vez a internet, lo primero que haces es buscar información sobre ellos, sus conciertos, sus vídeos, su próximo disco. Pero desde entonces, Linkin Park dejó de ser para mí lo que era, pero ni mucho menos eso quiere decir

que dejara de escucharlos, que no tuvieran nuevas canciones que me gustaran o que no disfrutara en su concierto. Ni mucho menos, pero el cambio fue muy radical. Pasaron de tener su estilo propio, personal, a algo totalmente comercial, en el que intentaban atraer a un público más amplio si cabe. Ahí fue cuando todo cambió. Con la salida de "A Thousand Suns" vimos a un grupo intentando adaptarse a los tiempos que corren, totalmente cambiado y que perdió totalmente el sentimiento de sus primeros trabajos.

Personalmente, es un grupo que me marcó un antes y un después y siempre les estaré agradecido en ese sentido. Después de tenerles en el completo olvido, de creer que no volvería a escuchar un disco suyo desde la primera a la última canción, me he llevado una sorpresa. He decir que para nada se acerca a lo que fueron, pero me han dado una dosis de confianza como gran fan que soy de ellos.

Es un trabajo que guarda mucha relación con el disco anterior. Mantienen mucho los ritmos electrónicos y un hip-hop bastante débil, con bases muy simples. No obstante, es un disco más fluido, cosa que no había pasado con sus anteriores trabajos. Tema tras tema, no nos resulta tan pesado, como podía pasar con el anterior. Todo comienza con las que, me atrevería a decir que son sus dos mejores canciones. "Lost in the Echo" y "In my Remains" son quizá, lo más destacable del disco. Mantienen esa atmósfera electrónica, pero llevan el espíritu de canciones que te recuerdan a "Crawling" o "Somewhere I Belong". Luego nos encontramos el que fue el single, "Burn it Down"con un estribillo fuerte, pegadizo y  muy melódico, pero que pasa muy desapercibido. "Lies Greed Misery" es la pieza que más sale de plano del álbum. Mucho hip-hop con ese toque Chester Benington que sólo él es capaz de dar. Requiere escucharla más de una vez para encontrarle el punto. "I'll Be Gone" nos recuerda a piezas como "What I've Done" o "Breaking the Habit" y carece de ese toque electrónico. Personalmente, creo que tiene muchas posibilidades de convertirse en un futuro single.

En la segunda mitad encontramos "Victimized", la canción que quizás más me haya ha impresionado. La más fuerte y enérgica del disco a pesar de su corta duración. A partir de este punto, el trabajo toma una trayectoria totalmente descendente, en los que solo destacaríamos "Skin to Bone" o "Powerless", que recuerda mucho a "Pushing Me Away".

Ha sido una agradable sorpresa, aunque no creo que se convierta en un gran trabajo. Aún así han demostrado que tienen mucha calidad y que todavía son capaces de componer buenos temas. Han adaptado sus raíces a el día de hoy, con un toque mas fresco y ese toque electrónico que arrastran de su anterior trabajo, cosa que, personalmente, no me entusiasma demasiado.

Os dejo con "Lost in the Echo", quizá una de las mejores canciones de este "Living Things"